Las familias están conectadas emocionalmente dentro de un sistema complejo y, como en todo sistema, cualquier cambio sutil puede tener un efecto, ya sea positivo o negativo, sobre el conjunto. La falta de confianza, ruptura en la comunicación o conflictos pueden alterar a la familia más unida, a veces en el corto plazo, pero a menudo por años o incluso décadas, arriesgando la sustentabilidad general de la empresa patrimonial. Por eso es importante conocer cómo construir un legado familiar.
Después de haber trabajado varios años con familias multigeneracionales, he observado que las familias exitosas son capaces de mitigar estos riesgos y soportar los desafíos del conflicto multigeneracional, armadas con un proceso concreto de toma de decisiones y estructura: ven su patrimonio familiar como un negocio. Por ello, crean una empresa patrimonial única y adoptan las mismas prácticas de excelencia y recursos de cualquier empresa exitosa.
Es vital desarrollar un marco para la comunicación y la toma de decisiones. Este marco se conoce como Gobierno Familiar. Aunque las estrategias del Gobierno Familiar varían mucho y raramente son iguales de una familia a otra, hay tres aspectos que definen una estrategia de gobierno exitosa:
Establecer estas prácticas ayudará a crear un ambiente nutritivo donde la comunicación pueda florecer, incluso en medio de las familias más conflictivas. Asimismo, valorar cada historia individual e incorporarla a la experiencia familiar, nos ayudará a adoptar múltiples perspectivas y desarrollar una misión y visión cohesivas.
Es importante que la familia dialogue sobre las generaciones pasadas: cómo vivieron, qué retos enfrentaron, sus pasiones, talentos e historia de la creación del patrimonio. Este diálogo facilita el proceso de descubrimiento. Una vez que las familias identifican qué visiones y metas comparten, el siguiente paso es crear una declaración de la misión familiar. Las mejores declaraciones responden clara y directamente a la pregunta: “¿Cuál es la máxima misión y propósito de nuestro patrimonio familiar, y cuál deseamos que sea nuestro legado?”. Una declaración detallada podría incluir: “La “Familia Pérez respetará la unicidad de cada miembro con honestidad y amor, alentando las inclinaciones para la iniciativa empresarial, con el fin de que todos los miembros de la familia puedan usar sus talentos para beneficiar a los demás y seguir construyendo nuestro legado y valores”.
Un buen gobierno familiar faculta a los miembros para que tengan la capacidad humana y financiera de crecer y evolucionar juntos, a pesar de los cambios en las condiciones internas y externas. Hay muchos asesores que pueden ayudar a una familia a crear una estrategia y tener mejores prácticas; sin embargo, resulta crítico que estén alineados con los valores e intereses de la familia, y puedan ver objetivamente toda la situación para ayudar a facilitar las decisiones. Las estructuras de gobierno pueden ayudar a resolver problemas antes de que surjan, y pueden ser una excelente herramienta preventiva cuando el equipo correcto está listo. Como dijo un famoso empresario: “Somos como el mecanismo de un reloj, cada parte es esencial”.
Antes de hacer tu próxima reunión con la familia sobre la empresa